
Pizza Hawaiana Gourmet: Una Reinterpretación Sofisticada
Pocas pizzas generan tanta controversia como la hawaiana. En Jessie's House Pizza, decidimos abordar este debate culinario reinterpretando completamente el concepto: sustituimos el jamón industrial por prosciutto artesanal, la piña enlatada por fresca caramelizada, y añadimos elementos que elevan esta creación a una experiencia verdaderamente gourmet.
El resultado es una pizza que incluso los más escépticos han terminado disfrutando, con un equilibrio perfecto entre lo dulce, lo salado y lo umami, donde cada ingrediente complementa al resto creando una sinfonía de sabores.
Historia y evolución
La pizza hawaiana tradicional, contrario a lo que su nombre sugiere, no fue creada en Hawái sino por Sam Panopoulos, un cocinero griego en Canadá, en 1962. Su combinación de jamón y piña fue innovadora en su momento, aunque se convirtió en objeto de debate entre puristas y amantes de esta fusión.
Nuestra versión busca honrar el espíritu creativo de Panopoulos pero con un enfoque gastronómico contemporáneo, utilizando técnicas e ingredientes que transforman este concepto en una experiencia gourmet digna de nuestra carta.
Ingredientes (para 1 pizza)
Para la base
- 1 bola de masa de pizza de 250g (puedes usar nuestra receta básica de masa)
- 60ml de salsa de tomate para pizza
- 80g de mozzarella fresca, escurrida y desmenuzada
- 30g de queso provolone ahumado, rallado (opcional)
Para los toppings
- 70g de piña fresca (aproximadamente 1/4 de piña pequeña)
- 60g de prosciutto de calidad (preferiblemente San Daniele o Parma de 24 meses)
- 1 cucharada de miel de acacia o miel de trufa
- 1 cucharada de mantequilla sin sal
- 1 ramita de romero fresco
- Chile rojo triturado al gusto (opcional)
- Hojas de albahaca fresca para decorar
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal marina y pimienta negra recién molida
Instrucciones
Preparación de la piña caramelizada
Preparar la piña:
- Pela la piña fresca y elimina el corazón duro.
- Córtala en rodajas de 1cm de grosor y luego en trozos pequeños de aproximadamente 2x2cm.
- Coloca los trozos en un colador y déjalos escurrir durante 15 minutos para eliminar el exceso de líquido.
Caramelizar:
- Calienta una sartén (preferiblemente de hierro fundido) a fuego medio-alto.
- Añade la mantequilla y deja que se derrita.
- Agrega los trozos de piña escurridos en una sola capa.
- Espolvorea una pizca de sal para realzar el dulzor.
- Cocina sin remover durante 2-3 minutos hasta que comiencen a caramelizarse por un lado.
- Voltea los trozos y cocina 2 minutos más.
- Añade la miel y la ramita de romero, mezcla bien y cocina 1 minuto adicional.
- Retira del fuego y reserva, quitando la ramita de romero.
Montaje y horneado de la pizza
Preparar el horno:
- Precalienta el horno a la temperatura máxima (idealmente 250-280°C) con una piedra para pizza o una bandeja del revés, durante al menos 45 minutos.
Estirar la masa:
- En una superficie ligeramente enharinada, estira la masa hasta formar un círculo de aproximadamente 30cm de diámetro.
- Forma un borde ligeramente más grueso.
Montar la pizza:
- Transfiere la masa estirada a una pala de pizza enharinada o papel de hornear.
- Extiende uniformemente la salsa de tomate, dejando libre el borde.
- Distribuye la mozzarella desmenuzada y, si usas, el provolone rallado.
- Coloca la piña caramelizada uniformemente sobre el queso.
- Si deseas un toque picante, espolvorea ligeramente chile rojo triturado.
Hornear:
- Desliza la pizza sobre la piedra o bandeja precalentada.
- Hornea durante 8-10 minutos, hasta que el borde esté dorado y el queso burbujeante.
Finalizar:
- Retira la pizza del horno.
- Inmediatamente coloca trozos finos de prosciutto sobre la pizza caliente. El calor residual lo templará ligeramente sin cocinarlo.
- Añade unas hojas de albahaca fresca rasgadas con las manos.
- Finaliza con un hilo de aceite de oliva virgen extra y, si lo deseas, un poco más de miel.
- Añade pimienta negra recién molida.
Servir:
- Corta en porciones y sirve inmediatamente.
Consejos del chef
- Selección de piña: Busca una piña madura pero firme. Debe oler dulce en la base y tener un color dorado uniforme. Evita completamente la piña enlatada para esta receta.
- Calidad del prosciutto: Es crucial usar prosciutto de buena calidad y nunca cocinarlo en el horno. Se añade al final para que mantenga su textura delicada y sabor complejo.
- Escurrido de ingredientes: Tanto la mozzarella como la piña deben escurrirse bien para evitar una pizza húmeda.
- Temperatura del horno: Como con todas las pizzas, la alta temperatura es clave. Si tu horno doméstico no alcanza temperaturas muy altas, considera usar una piedra para pizza precalentada durante más tiempo.
- Equilibrio dulce-salado: La clave de esta pizza es el equilibrio perfecto entre lo dulce de la piña caramelizada y la miel, y lo salado del prosciutto y el queso. Ajusta la cantidad de cada ingrediente según tu preferencia personal.
Variaciones
- Versión ahumada: Sustituye parte de la mozzarella por queso scamorza ahumado y añade un poco de pimentón ahumado a la salsa de tomate.
- Versión picante: Añade jalapeños en rodajas finas junto con el chile rojo triturado para un contraste picante con lo dulce.
- Versión vegetariana: Omite el prosciutto y añade champiñones salteados con un toque de salsa de soja para aportar umami.
Esta reinterpretación gourmet de la pizza hawaiana demuestra cómo los conceptos culinarios pueden evolucionar y refinarse. En Jessie's House Pizza creemos que no hay ingredientes prohibidos en la pizza, solo combinaciones por descubrir y perfeccionar. ¡Anímate a probar esta versión sofisticada de un clásico controvertido!